GUREN DECIDE HACER EL ÚLTIMO SACRIFICIO
Dispuesto a entregar su vida para salvar la de sus compañeros durante el asalto al instituto, Guren no duda en recurrir al poder del demonio que hay sellado en su arma. La bestia consigue apoderarse del cuerpo y la mente de su anfitrión, ante lo que Goshi, Mito y Shin’ya tratan de encontrar el modo de recuperar a su amigo. Cuando al fin lo consiguen, Guren les hace una petición que, aunque triste, es asimismo una muestra de la confianza que ha depositado en ellos.