Raúl Arnáiz quería crear su propia historia metafórica a través de los niños, y lo ha conseguido. En leyendas de ParvaTerra nos presenta un mundo mágico poblado por criaturas de cuentos de hadas, pero donde no hay adultos, todos han desaparecido.Ahora sólo quedan niños, eternamente jóvenes, que no recuerdan nada del mundo anterior. Niños olvidados y una profecía de un héroe que debe enfrentarse a su destino.
Raúl quería analizar "qué sucede cuando el ser humano se desentiende de sus responsabilidades como si fuese un niño, pierde su temor a un poder superior del que extraía su sentido moral, o se ve viviendo en un nuevo mundo carente de normas. Eso fue lo que me decidió a crear mi propia historia metafórica “a través de” niños, y no tanto “para” niños."
¿Cómo surgió la idea de ParvaTerra? Recuerda al mundo de Peter Pan y los niños perdidos.
ParvaTerra nació como proyecto para serie animada de TV. La serie nunca llegó a hacerse, pero había trabajado tanto en el proyecto que en vez de dejarlo en el cajón de los proyectos fallidos lo recuperé cuando dejé el mundo de la animación para pasarme al del cómic.
La idea de la historia nació de la mezcla de un puñado de obras que me gustan mucho, como Peter Pan o El Señor de las Moscas, entre otras. Referentes que tenían como protagonistas casi exclusivamente a niños, pero que no eran historias infantiles. Quise que ParvaTerra tratase, como en esas fábulas, temas como la madurez, la ética, el conflicto y la responsabilidad, en vez de limitarse a crear un mundo de fantasía y enfrentar a los personajes con el monstruo de turno como es habitual en el género, sobre todo si está dirigido a un público joven.
¿Cómo se te ocurrió hacer la separación de las tribus en función del color de pelo?
Quería que los niños de ParvaTerra se comportasen como los niños reales que se juntan en pandillas o discriminan a los demás en base a diferencias arbitrarias. Esto me servía como metáfora de lo irracionales que suelen ser también las razones que nos llevan a los adultos a luchar entre nosotros en el mundo, como el dios en el que crees, los ideales políticos o incluso por diferencias no elegidas como el color de la piel o la orientación sexual.
Por otro lado, por razones estéticas; quise que los bandos de niños estuviesen cromáticamente bien diferenciados y que basasen su iconografía y vestimenta en los colores con los que habían nacido -el pelo- y que les hacían sentirse diferentes y mejores que sus enemigos, y de paso lograr así que esto facilitase al lector la identificación de estos grupos.
Además cada una de las tribus tiene un oficio específico: caballeros, magos y piratas, ¿Cómo decidiste sus oficios?
En base a los valores y filosofías de vida de cada grupo, necesarios para crear conflicto y que reflejan las formas de ser de los seres humanos: los Pelirrubios son guerreros porque su intolerancia y desprecio hacia los demás, su egoísmo y búsqueda de beneficio personal a toda costa les lleva a luchar contra todos; los Pelinegros son Magos en el sentido de estudiosos y científicos que representan el respeto, la curiosidad y la necesidad de saber, de aprender y de conocer el mundo, y son quienes traen el progreso. Los Pelirrojos son Piratas porque viven la vida centrados en sí mismos y desvinculados de las disputas de los demás habitantes. No son malvados, pero el mundo no les interesa y no colaboran en las soluciones por lo que acaban formando parte del problema.
¿Qué conexión tienen con la trama la aparición de una tribu de monos?
La tribu de monos representa el máximo nivel de ignorancia, y son los menos avanzados entre los niños de ParvaTerra. Estos niños perdidos aún mantienen una sociedad tribal muy supersticiosa, poseen una mentalidad conservadora, estática y poco curiosa debido al miedo que sienten por lo desconocido.
La tribu de monos será el obstáculo de este tomo para ellos, como lo es siempre la ignorancia en la búsqueda de cualquier conocimiento y de la libertad que este trae.
El color en tu obra es muy vivo, pero en el tercer tomo esos colores se van apagando. ¿Qué querías transmitir con este cambio?
El primer ciclo de Parva Terra es más alegre, colorido y luminoso porque cuenta, desde la perspectiva de los pequeños protagonistas, el principio de la aventura de estos niños que aún viven una vida relativamente feliz y carente de problemas serios. Pero según avanzan los tres primeros tomos vemos cómo deben abandonar su placentera vida infantil para embarcarse en una peligrosa aventura, y esto se refleja cada vez más en los colores.
El cuarto tomo es el inicio de un nuevo ciclo algo más oscuro y maduro, ya que los niños poco a poco van entrando en la edad adulta que les era negada al inicio de la serie, y además ya arrastran algunas tragedias a sus espaldas. Comenzar este nuevo ciclo con un Leo solitario en tierras heladas y oscuras siempre me pareció el comienzo más adecuado de este nuevo arco, y la manera lógica de continuar el camino de los personajes hacia la madurez.
Tu obra está muy influenciada por tu paso por la animación ¿Qué otras influencias tiene?
Cine, literatura, videojuegos, cualquier cosa. A nivel gráfico, un par de entregas de la saga Final Fantasy formaron parte de las referencias que dieron forma al proyecto. Hay artistas realmente grandes haciendo videojuegos y me han influenciado tanto como otros artistas más “tradicionales”.
Para bien o para mal, creo que la literatura, el cine, o la animación me han influenciado más a la hora de hacer cómics que los propios cómics, aunque el cómic y los videojuegos, de gran carga fantástica, me han influenciado mucho también. En cuanto a los cómics, lo que me han marcado mucho son Otomo, Miyazaki, Moebius o Mignola.
¿La obra está pensada para un público infantil, adulto, ambos…?
En realidad está pensada para mí, que soy mitad y mitad creo yo. Se que así corro el riesgo de que ParvaTerra le parezca demasiado infantil a un adulto y demasiado denso a un niño, pero quiero creer que tiene suficientes elementos interesantes como para acabar satisfaciendo a todas las edades por una u otra razón. Eso deseo, al menos.
¿Qué nos puedes adelantar de los dos tomos que faltan para concluir la historia?
Leo se acercará cada vez más a la verdad que se les ha ocultado a los niños de ParvaTerra y tendrá que tomar duras decisiones al respecto. Salir de la isla para emprender una aventura tan peligrosa como las que cuentan sus mitos y leyendas no fue una decisión fácil, pero lo peor está por llegar y los héroes tendrán que demostrar de qué pasta están hechos.
En los siguientes libros lo que les espera a los lectores es más misterio, peligro y aventuras en tierras lejanas hasta ahora desconocidas, y algún que otro inesperado giro de guión.
Has sido galardonado con el premio al autor revelación en Expocómic 2013 por ParvaTerra ¿Qué ha supuesto para ti este premio?
Siempre es un honor y un placer recibir cualquier premio, sobre todo si es del público, pero para mí no ha supuesto un gran cambio; sigo trabajando igual que antes pero con la satisfacción de saber que muchas personas valoran mi esfuerzo, lo que me anima mucho a seguir adelante.
¿Qué nuevos proyectos tienes?
Pues gracias al crowdfunding, y después de publicar una primera edición el verano pasado, acabo de autopublicar una segunda de HOME, un cómic de ciencia ficción que mi amigo Óscar Herrero y yo publicamos en Francia en 2008. El resultado de aquella edición nos decepcionó bastante, por lo que hemos querido publicarlo aquí nosotros mismos, sin intermediarios, sólo por placer.
Así que ahora que lo he publicado por fin, estoy metido de lleno escribiendo varios cómics nuevos como autor completo (dos de fantasía y una space opera algo sombría, ambos para adultos) y que tengo muchas ganas de llevar a cabo. Cruzo los dedos para que salgan adelante.
25 de febrero de 2014