CLASE LETAL REGRESA PARA MOSTRARNOS LA APATÍA Y EL CINISMO DE LOS AÑOS 90.
En 1991, Marcus vive en una bañera, reparte pizzas y se esconde de la dolorosa realidad. Como el pasado lo atormenta y es incapaz de cambiar, se automedica con drogas, sexo y esnobismo musical. Pero es incapaz de dejar el pasado atrás. Aquellos que nos hacen daño dejan una huella imborrable en nuestra memoria, pues el amor no puede sanar las heridas más profundas. Y nada puede herirte más que la traición de alguien a quien amas de verdad.