YÛICHIRÔ ESTÁ CADA VEZ MÁS CERCA DE DEJARSE POSEER POR EL DEMONIO…
Guren encuentra a Yûichirô después de que el muchacho haya sido capturado por la secta Hyakuya, pero no parece estar dispuesto a liberarlo de sus ataduras. Mientras tanto, Mikaela debe hacer frente a la inesperada aparición de Mahiru para rescatar a su amigo y obligarlo a huir a pesar de la confianza que Yûichirô sigue depositando en Guren. No son estas las únicas amenazas a las que se enfrentan, puesto que Noya no tarda en hacer gala de su poder ante los chicos.