Page 15 - ROYALTY WITCHES 2

La sombra de una sonrisa cruzó la cara de Lilith, aunque, al momento,
había desaparecido. Kat apretó sus labios para contener la suya. Rion no
tenía nada que ver con Shin, era obvio. Pero eso no significaba que fuera
malo. Los malos eran otros. Kat no iba a olvidarse de eso.
Las dos palmas de Emma conectaron con la madera de la mesa y enton-
ces se levantó, haciendo mucho más ruido del necesario. Una de las comi-
suras de Lilith se volvió a alzar. Era obvio que Emma estaba esforzándose
para parecer intimidante. Kat vio cómo llegaba hasta Rion en un par de
zancadas y le extendía la mano.
—Emma Torres…
—Primer astil —acabó él, de nuevo. La enorme y brillante sonrisa había
vuelto a sus labios.
Emma alzó una ceja al tiempo que acababan el saludo.
—Tienes que entender algo, queremos ganar la Liga pero también que-
remos salvar a Shin.
Kat se sorprendió de que Emma compartiera las intenciones secretas de
su aquelarre con tanta facilidad.
—¿En serio? —preguntó Rion alzando sus cejas dispares.
—Eso significa que es posible que tengamos que «manejar a la
OCL» —explicó Emma haciendo un curioso gesto con los dedos. Li-
lith sonrió al oírlo y esta vez dejó que el gesto ocupara todo su bellí-
simo rostro.
Rion volvió a hacer su pestañeo, y Kat se preguntó si era típico de su clan
o algo simplemente suyo. Se rascó con un dedo su ceja azabache y luego
volvió a sonreír.
—Si os ayudo, ¿me daréis un beso de bruja?
Emma y Lilith fruncieron el ceño a la vez y un grave carraspeó mal disi-
mulado de tos salió de Seth, que seguía a un lado.
—¿Un qué? —logró decir Emma al fin.
El chico la miró, su expresión clara como el día.
—Un beso de bruja —repitió—. Se dice que besar a una bruja trae
buena fortuna para ti y para tu clan. Así que me gustaría volver a llamarada
ámbar con un beso de bruja. Estoy aquí para asistiros en la Liga pero si
también puedo ayudaros con vuestro indómito, lo haré.
Tras sus últimas palabras un pesado silencio se esparció por el salón.
«Vuestro indómito.» Kat no necesitaba el don de Emma para saber que
todas estaban pensando lo mismo.

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